Tesoro de Oriente Medio.

Bañado por el mar Mediterráneo, Líbano es un pequeño país, hogar de los cedros y heredero del territorio fenicio, que nos ofrece muchos atractivos; sus ruinas romanas, sus ciudades antiguas, sus estaciones de esquí; espectaculares paisajes; muestras de arquitectura islámica y una sorprendente y deliciosa gastronomía.

En su capital Beirut, podemos deleitarnos con sus antigüedades desde la prehistoria hasta el imperio otomano en su Museo Nacional, y pasear por el centro de la ciudad donde observar monumentos y lugares que abarcan 5.000 años con civilizaciones como los caneos, otomanos, fenicios, persas, helenísticos, romano, bizantino, omeya, abbasí, los cruzados y los períodos mamelucos.

La Gruta de Jeita, que fue nominada para ser una de las Siete Maravillas del Mundo, caverna adornada con todas las formas y tamaños de estalactitas y estalagmitas situada al norte de Beirut.

La localidad de Harissa, donde se encuentra la «Dama del Líbano». En las alturas (más de 600 m), se encuentra una inmensa estatua inmaculada conocida como la bahía de Jounieh. Construida a finales del siglo XIX, la estatua de la Virgen domina un santuario (una capilla en el pedestal).

La ciudad de Byblos, una de las más antiguas habitadas de forma continua en el mundo, una joya rara entre los sitios arqueológicos. Las excavaciones muestran que se remonta al milenio sexto antes de Cristo.

La ciudad de Tripoli, una ciudad en la que lo moderno y lo medieval se mezclan, conocida como la capital del norte, Trípoli es la segunda ciudad más grande de Líbano. Pasear para conocer sus mezquitas, sus mercados donde trabajan sastres, joyeros, curtidores, etc.

La ciudad de Sidón, la 3ª ciudad fenicia más grande, se puede disfrutar visitando las ruinas de la iglesia fortaleza conocida como el Castillo del Mar, que fue construido por los caballeros cruzados de San Juan.

No podemos olvidar la gran joya, las ruinas romanas de Baalbeck, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y uno de los yacimientos arqueológicos más atractivos del mundo por sus templos de los siglos I-III, toda una belleza.

Además de todo esto, uno de los grandes tesoros del Líbano es su variada gastronómia: mezza, hummus, baba ganoush, shish taouk, kibbe nayeh, manakeesh, fattoush, kunafeh son muchas de sus especialidades.

¡Bienvenido a Líbano!