La tierra de los contrastes

Imaginemos un viaje por Argentina: desayunar en un Café Notable de Buenos Aires, caminar sobre el Glaciar Perito Moreno, probar el mate, cruzar los Andes, escuchar el silencio en la Puna, disfrutar de un Vino de Altura en Cafayate, comer una parrillada, pasear en bicicleta por los viñedos de Mendoza, ver el atardecer en la Quebrada de Humahuaca, navegar por el Fin del Mundo , bailar el Tango, cenar una centolla en Ushuaia, caminar de noche por las Cataratas del Iguazú, dormir en una Estancia Patagónica…todo ello y mucho más nos ofrece este país único e inigualable. Adentrémonos un poco en él:

El Sur fascina al viajero: glaciares, lagos, montañas y animales, la Argentina que siempre imaginamos y soñamos aparece ante nosotros. Una belleza sobrecogedora que inevitablemente nos dejará con la boca abierta. Aquí la naturaleza hace pequeño al ser humano.

La ciudad de Buenos Aires y los inevitables porteños, la elegancia de sus avenidas, el encanto de sus barrios y el sonido del Tango de fondo. La ciudad en la que siempre hay algo que ver, comida que probar y porteño con el que hablar.

Las Cataratas del Iguazú, sencillamente imprescindibles. Un lugar mágico, romántico y único.

Sin olvidarnos del Noroeste, el lugar donde conocer la “otra Argentina”, la que llega al alma y enamora; donde los silencios, los colores, los paisajes, las costumbres, su gente, se meten bajo la piel. El lugar que querremos seguir conociendo y del que queda mucho por descubrir.

Los tiempos cambian y la forma de viajar también: viajar en grupo por el país, tomar un coche de alquiler, montar en bicicleta por diferentes senderos, navegar en kayak, dormir en un crucero… Un país que sabe ofrecer a cada viajero el tipo de viaje que está buscando.

Todo esto y mucho más nos espera en la tierra de los contrastes.

¡Bienvenido a Argentina!